Ajo y Sal

Carmen Muñoz

Hemos ido muchas veces por la buena terraza y porque aunque escaso la comida está buena. Pero esta vez los platos eran excesivamente escasos. El pan no tocábamos ni a un pedacito cada uno. Muy, muy exagerado. Nos quejamos porque en había 4 patatas contadas en dos platos de huevos rotos con jamón. Nos quejamos porque eran demasiado pocas patatas, ¡que es lo más barato del plato!. Vino el dueño de forma muy desagradable atacándonos a nosotros, hablándonos de que el jamón era bueno (nosotros hablábamos que le pudieran más patatas) montando un escándalo haciendo un juicio a los camareros que nos habían atendido allí mismo. Tremendamente desafortunado el dueño. Porque dijimos que lo dejara ya que casi nos agua la cena. Para no volver nunca más, pero por este señor y la cocina exageradamente escasa. No por los camareros ni la terraza. ¡Nunca más! Le hubiese costado muy poco llegar, pedir disculpas, poner una patata más entre los dos platos, ahorrarse esta reseña y perder a 8 clientes habituales. Nos dijo hasta que nos fuésemos si queríamos. Él sabra cómo dirige su local, pero así le irá. Trata fatal a sus camareros y a los clientes, no nos gustó nada la actitud de este señor.

Cristina Galán

He ido con unos amigos a celebrar mi cumpleaños y después de un montón de veces que hemos estado, ha sido bastante decepcionante. La calidad de la comida ha bajado considerablemente, las rabas estaban durísimas y no eran pequeñas como antes. Pedimos unos huevos rotos con jamón y eran un chiste, un plato ridículo con 4 patatas por 12€, bastante vergonzoso. Pero lo peor de todo, fue la atención y avergonzarte comportamiento del dueño. Comentamos con el camarero que nos había atendido otras muchas veces, (majísimo por cierto)la ridícula cantidad del plato de huevos rotos e inmediatamente vino el dueño con una falta de educación, saber estar y mal comportamiento que fue bochornoso. Llamó al pobre chico y le humilló delante de todos. Una vergüenza!! Ese tipo maleducado que no sabe atender al público y quiere ahora aprovecharse de la gente, se fue diciendo que si no nos gustaba, que nos fuésemos... En definita, que 9 personas que estábamos allí, ya no vamos a volver nunca más. Una pena porque tiene un personal que no se lo merece. Por cierto, nos fuimos al terminar y dejamos propina para ese chico, como unos señores. No como él, que dio la casualidad que fui al baño y lo escuché mofarse de que habíamos prostetado y luego habíamos dejado propina. Eso ya lo dice todo... Señor, la propina obviamente no fue por su mala educación ni la baja calidad de sus productos, si no para el chico que nos atendió amablemente! Afortunadamente hay varios sitios más en el mismo bulevar que atienden muy bien, con mayor calidad y mejores precios.

Ignacio Villatoro López

Platos fríos y algo grasientos por lo general. Sólo se salvaron las croquetas de jamón. Tarta de queso poco casera. Servicio deficiente, tardando mucho en atender y servir. Necesita mejorar completamente.

Luis Cáceres Ortega

Nada medio bueno que comentar, todo es pesimo pero lo peor sin duda la falta de educación del dueño